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Ecografía prueba diagnóstica

Esta prueba diagnóstica no incluye pruebas o consultas sucesivas derivadas de la misma.

IMPORTANTE: Este servicio tiene una consulta telefónica previa incluida en el precio, para la prescripción de la prueba.

Te daremos cita a través del chat de SanIA, tras seleccionar el Centro Médico u Hospital de preferencia.

Ecografía, ¿qué es?

La ecografía es una prueba diagnóstica no invasiva que realizamos en nuestros Centros Médicos y Hospitales de Sanitas. En esta prueba se utilizan ondas de ultrasonido para obtener imágenes en tiempo real del interior del cuerpo. Es una herramienta fundamental en medicina porque permite visualizar órganos, tejidos y estructuras sin necesidad de radiación, lo que la convierte en una técnica segura y adecuada para todo tipo de pacientes, incluidos embarazadas y niños.

El procedimiento es sencillo y no requiere preparación especial en la mayoría de los casos, recomendamos seguir las instrucciones del médico. Se aplica un gel conductor sobre la piel y, mediante un transductor, se emiten y reciben ondas que generan imágenes en un monitor.

Tipos de ecografía

Existen varios tipos de ecografía, según la zona del cuerpo que se desea explorar:

Ecografía abdominal: permite observar órganos como el hígado, riñones, vesícula, bazo o páncreas.
Ecografía ginecológica y obstétrica: se utiliza para valorar el útero, ovarios y el seguimiento del embarazo.
Ecografía mamaria: complementa la exploración de la mama, sobre todo en mujeres jóvenes o con mamas densas.
Ecografía musculoesquelética: útil para detectar lesiones en tendones, músculos o articulaciones.
Ecografía doppler: mide el flujo sanguíneo en venas y arterias, ideal para estudiar la circulación.

¿Por qué es una prueba tan utilizada?

La ecografía destaca por ser una técnica accesible, sin riesgos, que ofrece resultados inmediatos. Se utiliza tanto en el diagnóstico de enfermedades como en el seguimiento de tratamientos o cirugías. Además, su capacidad para repetirse sin efectos secundarios la convierte en una prueba de control ideal.

En muchos casos, es la primera herramienta diagnóstica que se solicita ante la aparición de síntomas abdominales, molestias articulares o durante revisiones rutinarias.